Grave crisis en seno del Consejo Electoral venezolano

["Nello Margiotta" <animarg at tin.it>]

Javier Rodríguez

Caracas, 6 nov (PL) La crisis interna del Consejo Nacional Electoral (CNE)
venezolano se agravó hoy con la renuncia irrevocable de su presidente
Roberto Ruiz.
Ruiz denunció la campaña pública de descrédito en su contra hecha por Rómulo
Lares, uno de los cinco directivos del organismo, a quien se identifica como
vinculado a los grupos de oposición al presidente Hugo Chávez.
En realidad, desde el pasado mes de abril, cuando la dirección del CNE se
declaró incapaz de tomar una decisión sobre las últimas elecciones
sindicales, consideradas como fraudulentas, tres de sus ejecutivos
dimitieron ante la Asamblea Nacional
Posteriormente, se desarrolló un movimiento interno auspiciado por los
adversarios del gobierno para lograr la destitución o renuncia de Ruiz a fin
de que Lares asumiera la presidencia del órgano electoral.
Hoy, tras el anuncio de la retirada de Ruiz, Lares, en unión de Alfredo
Avella, otro de los directivos de similar criterio político al suyo, dijeron
a la prensa que acelerarán la posible convocatoria a un referendo consultivo
en el país.
Esa consulta popular, solicitada por la oposición, pretende favorecer un
pronunciamiento reclamando la renuncia de Chávez, algo estimado
anticonstitucional, pues esa atribución la tienen los referendos
revocatorios.
Esta última figura sólo puede ejercerse después de cumplida la mitad del
mandato presidencial, es decir, a partir de agosto del 2003, pero los
adversarios del Jefe de Estado pretenden dar carácter de revocatorio al
plebiscito consultivo.
De todas formas, el abandono de su cargo por Ruiz deja la directiva en sólo
cuatro miembros, lo que, supuestamente, debía inhibirla para tomar
decisiones, pero Lares y Avella parecieron estar listos para ignorar esa
reglamentación.
Mientras tanto, el Tribunal Supremo de Justicia tiene 15 días para
pronunciarse sobre una petición del Jefe de Estado, quien alegó violación de
la Constitución con la permanencia en sus cargos de una directiva
renunciante y de poca credibilidad.
Debe señalarse que el Parlamento debió ya iniciar el proceso para elegir a
quienes dirigirán el CNE, pero esto fue obstaculizado por los legisladores
opositores deseosos de utilizar para sus planes a los actuales funcionarios.
Por su parte, la llamada Coordinadora Democrática, que agrupa a los partidos
de oposición y las cúpulas empresarial y sindical, amenazó hoy con desatar,
en los próximos días, una huelga general indefinida hasta la renuncia de
Chávez.
Esa declaración, de corte desestabilizador, adquirió una tónica
insurreccional cuando el dirigente sindical opositor Carlos Ortega, llamó a
las fuerzas armadas a intervenir contra el gobierno al decretarse la huelga.


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Nello

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