Gruppo di Rio: ridurre le spese militari per vincere la poverta'



El mensaje del presidente peruano, Alejandro Toledo, de ganar la guerra a la
pobreza en América Latina limitando los gastos militares, caló hondo en el
Grupo de Rio, que acogió con entusiasmo la propuesta.

En su primera salida del país como presidente -cargo que asumió el pasado 28
de julio-, Toledo dijo sentirse satisfecho de que su propuesta de examinar
gastos militares, expresada durante su posesión, haya tomado fuerza en la
Cumbre del Grupo de Rio.

En la primera jornada de la Cumbre, el presidente chileno Ricardo Lagos dio
algunas precisiones de cómo se trabajará en ese frente. Según dijo Lagos en
un discurso, inicialmente se comparará el gasto militar de los países de la
región como un primer paso para proceder a limitar el mismo.

La Declaración de Santiago, documento final de la Cumbre, recoge esta
inquietud.

"Reafirmamos la necesidad de fortalecer las medidas de confianza mutua y
cooperación en el ámbito de la Defensa, así como la importancia de que los
gastos del sector se realicen con un máximo de transparencia y de pleno
conocimiento público", señala el documento.

"En ese sentido, reiteramos nuestro firme propósito de adoptar medidas que
contribuyan a una efectiva y gradual limitación de gastos de defensa en la
región, con la finalidad de disponer de mayores recursos para el desarrollo
económico y social de nuestros pueblos, lo que constituye la más importante
medida de confianza mutua, junto con el compromiso de solucionar
pacíficamente las controversias".

Como un primer paso dentro de estas iniciativas, Toledo anunció para el
próximo 10 de septiembre una reunión de cancilleres y ministros de Defensa
de Perú y Chile para realizar una evaluación del inventario de armas de los
dos países.

Siguiendo con la idea señaló que "acordamos concretamente que para el 10 de
septiembre los ministros de Relaciones Exteriores y de Defensa tanto del
Perú como de Chile se reunirán en el primer encuentro para evaluar el stock
de armas en ambos países, para ir evaluando e ir avanzando en esa voluntad
política para reducir los gastos militares".

"Hay una sola guerra que quiero ganar: la guerra contra la pobreza. Pero no
tenemos recursos, por lo que tenemos que entrar ahí.

En la medida en que hemos firmado un acuerdo con Chile, no tengo razones de
gastar más en armamento. Estoy seguro de que millones de chilenos comparten
esto conmigo y con el presidente Lagos", indicó.
Toledo señaló que aún no se ha determinado si la información sobre los
stocks de armas será pública.

Consultado sobre qué pasaría con una compra de aviones caza F-16 que está
gestionando Chile, Toledo dijo en rueda de prensa que no iba a ser tan
arrogante para cuestionarla.

Este sábado el presidente Lagos destacó la importancia de la homologación en
el tema de gastos militares, de manera que haya una evaluación correcta de
cuánto gasta cada país en la región.

Señaló igualmente que todo parte de un tema de confianza mutua. Y citó un
ejemplo: "cuando el busque insignia de la Armada argentina tuvo que tener
determinado tipo de reparaciones y refacciones, se envió a los astilleros en
Chile. Creo que estamos en un mundo distinto", dijo.

El FMI señala en un informe que en un balance por regiones los países de
América Latina fueron los que menos dinero destinaron a sus gastos
militares.

Si bien ya en el pasado América Latina fue una región con pocas guerras
internacionales, comparada con el resto del mundo, el riesgo de conflictos
disminuyó aún más en los años 90, según el informe, lo que se refleja en la
tendencia de los gastos de defensa.

En la primera mitad de los 90, los gastos de defensa en América Latina
ascendían al 1,6% del PIB como promedio anual, menos que el promedio mundial
1996/97 de 2,3% del PBI. En el último informe, de 1999, la cuota
latinoamericana se redujo a 1,2% del PIB.

Nello

change the world before the world changes you

www.peacelink.it/tematiche/latina/latina.htm