Ecuador: Importantes fuerzas sociales y 3000 delegados se pronunciaron en Quito:



 Resoluciones del Congreso de los Pueblos de Ecuador

El jueves 11 de julio, en el Coliseo de la Universidad Politécnica
Salesiana de la capital ecuatoriana, se reunieron alrededor de tres
mil delegados de bases sociales de las organizaciones de trabajadores,
indígenas, maestros, campesinos, pequeños industriales, comerciantes
minoristas, estudiantes, mujeres, derechos humanos, jubilados,
religiosos, ex militares y otros del país. Se escucharon mensajes de
organizaciones que no pudieron estar presentes en el Acto. Hebe
Bonafini, Presidenta de las Madres de Plaza de Mayo, fue ovacionada
luego de su intervención en la que saludó la lucha de los pueblos de
Ecuador, a quienes llamó a unir fuerzas para impedir que se repita la
debacle argentina. Organizaciones políticas como el MPD, PCMLE, MIR,
Partido Socialista y otras, también respaldaron el evento. La CONAIE
(organización indígena más grande y cuyo brazo político, Pachakutik,
cogobierna con el Presidente Gutiérrez) no asistió, pero saludó al
Congreso, instando a la unidad para evitar que el País sea liquidado
por los neoliberales incrustados en el gobierno. Durante la
realización del Congreso, los participantes se solidarizaron con los
dirigentes petroleros anti privatizadores que son buscados por las
fuerzas de seguridad, rechazaron las pretendidas privatizaciones de
empresas públicas y recursos naturales y la Ley de Unificación
Salarial, condenaron la entrega del Presidente y su gobierno a los
dictados de Bush y el FMI, felicitaron al MPD por su salida del
gobierno, rechazaron la participación militar ecuatoriana en las
maniobras UNITAS, en el Plan Colombia y exigieron la salida inmediata
de las tropas estadounidenses de la Base de Manta.



¡ YA BASTA !

Hemos esperado seis meses. Establecimos compromisos con Lucio
Gutiérrez para cumplir el Mandato del 21 de Enero de 2000, a fin de
refundar la República: reactivar la producción y salir ordenadamente
de la dolarización; derrotar la corrupción pública y privada y
construir un cuarto poder moral de la nación, detener el ALCA,
defender la soberanía nacional e impulsar una integración diferente;
detener la privatización de los recursos estratégicos, sobre todo
petróleo, electricidad, telecomunicaciones, seguridad social,
educación y salud, y desarrollar un firme proceso de modernización;
impulsar una política de paz y no alineamiento ante el conflicto
colombiano; impulsar la reactivación de la economía rural y un plan
nacional de desarrollo humano para enfrentar la pobreza y el
desempleo.

Pero vemos con indignación que Lucio Gutiérrez ha optado por continuar
la misma política neoliberal que él condenó; se ha unido a los
representantes de la derecha oligárquica, con los Febres Cordero, los
Pozo y los Arboleda; se ha convertido en el principal aliado del
gobierno de Bush y en el más disciplinado ejecutor de las políticas
del FMI. No podemos tener ninguna esperanza en este camino, pues ya
sabemos a dónde ha conducido a los pueblos de Nuestra América.

Las causas de la crisis no han sido resueltas, si no que se han
ahondado: estamos ante una grave recesión económica, han crecido el
desempleo y el subempleo, y se nos ha conducido a un creciente
involucramiento en la guerra en la frontera con Colombia. Y lo que es
más preocupante, han surgido nuevas formas de autoritarismo, con la
persecución contra los dirigentes laborales, indígenas, populares y
sociales, ahora convertidos por el Gobierno en delincuentes y
terroristas, con la acción de redes de espionaje y la reimplantación
de la Doctrina de Seguridad Nacional como la norma máxima de la
República.

Hoy llamamos a todas nuestras organizaciones y a nuestro pueblo a
decir ¡YA BASTA! Estamos ante la obligación moral y política de
retomar el camino histórico que construimos juntos en nuestra lucha:
pueblos indígenas, movimientos sociales, organizaciones laborales,
organizaciones campesinas, militares patriotas, fuerzas políticas,
empresarios honestos, cristianos comprometidos, organismos de derechos
humanos, organismos de defensa del medio ambiente y ciudadano/as
democráticos.

Estamos ante una disyuntiva programática: o somos capaces de cerrar el
paso a las fracasadas recetas neoliberales o veremos el debilitamiento
de nuestra Patria. No hay espacio para posiciones intermedias.

En este CONGRESO DE LOS PUEBLOS reasumimos nuestro camino de unidad e
independencia. Concluyeron los tiempos de manipulaciones del diálogo,
de los pliegos de aspiraciones y de los pedidos al Gobierno. Iniciamos
nuestro camino soberano, en una línea de oposición democrática y de
impulso del PLAN DE GOBIERNO DE LOS PUEBLOS:

Vamos a organizar a nivel nacional, regional y provincial el CONGRESO
DE LOS PUEBLOS, como un espacio de unidad y de decisiones para
defender la soberanía, el patrimonio nacional, la vida y la
democracia. Presentar ante el País y debatir el PLAN DE GOBIERNO
aprobado el 20 de julio.

Llamamos a todas las fuerzas sociales indígenas, productivas y
políticas que estén dispuestas a enfrentar la política neoliberal y a
construir un Ecuador justo para todas y todos a participar en este
proceso de unidad y lucha.

Convocamos a todo el pueblo ecuatoriano defraudado por la traición del
Gobierno a movilizarnos el 21 de agosto de 2003.

Para buscar una salida a la crisis, planteamos:

a) Detener las privatizaciones y concesiones del petróleo,
electricidad, seguridad social, telecomunicaciones, salud; suspender
el intento del Gobierno de apoderarse de los fondos de la seguridad
social y de los excedentes petroleros para destinarlos al pago de la
deuda externa. Impulsar un proceso de modernización de las empresas
públicas.

b) Impulsar la lucha por un Plan Emergente de reactivación Económica,
que empiece por el respaldo al campo y a las empresas productivas
públicas y privadas, por suspender todas las formas de continuación
del salvataje bancario, y por acordar una salida ordenada de la
dolarización. Rechazar la elevación de los impuestos, en particular de
los predios rústicos, y de las tarifas de los servicios básicos, en
particular de la electricidad y la telefonía.

c) Exigir el cese de la persecución contra los trabajadores
petroleros, profesores de la Escuela Politécnica Nacional, comunidades
indígenas de Sarayacu y a más compañeros/as acusados de subversivos y
terroristas. Defender el respeto al derecho a la organización, a la
privacidad de la comunicación y exigir que se eliminen las redes de
espionaje. Demandar a los organismos judiciales, en particular, y a la
fiscalía, para que no se sometan a las presiones políticas del
Ejecutivo, y levanten inmediatamente las injustas órdenes de prisión y
visto-buenos contra nuestros compañeros y compañeras. Exigir la
inmediata salida del Frente Económico y del Ministro de Energía Carlos
Arboleda.

d) Fortalecer las Campañas de Lucha Contra el ALCA, la Base de Manta,
el Plan Colombia y las privatizaciones.

e) Defender los derechos laborales a la organización, a un salario
digno, a la contratación colectiva. Defender el derecho de los
jubilados a una elevación sustancial de las pensiones. Detener el
proyecto de Ley de Unificación Salarial, que es una trampa para
destruir la estabilidad de los trabajadores y reducir sus ingresos.
Proponer una Ley de Equidad Salarial. Exigir respeto a los derechos de
los comerciantes minoristas e informales.

 f) Luchar por la elevación del presupuesto social para combatir la
pobreza, sobre todo con el fortalecimiento de la educación, la
seguridad social y la salud pública. Oponernos a las migajas de los
"bonos de pobreza" y de las "palas y azadones". Oponernos a la
elevación del precio del gas y exigir una política que elimine a los
intermediarios, controle el contrabando y el consumo suntuario, y
fortalezca la participación de PETROECUADOR en el envasado y
comercialización.

Esta es la hora de la UNIDAD. Vamos a juntar nuestras fuerzas para
construir el País que aspiramos para todos y todas, pues sabemos que
otro ecuador sí es posible.