Le buone relazioni con gli USA del nuovo Pres. di Bolivia



Al nuevo presidente boliviano le espera buena relación con EEUU

Por: Francisco Roque Bacarreza, dpa. (http://www.eldiario.net)



El Plan Dignidad que comandó Jorge Quiroga bajo la presidencia de Hugo
Banzer se ha transformado para el futuro mandatario boliviano en el buque
insignia de la relación con Estados Unidos.


Washington, julio 30 (dpa) -

Al futuro presidente boliviano Jorge Quiroga, quien asumirá el cargo el 6 de
agosto en sustitución del renunciante Hugo Banzer Suárez, le espera una
buena relación con el Congreso y el Gobierno de Estados Unidos por los
fuertes lazos que desarrolló desde la vicepresidencia, en sintonía con la
estretagia regional de Washington.

El Plan Dignidad que comandó Quiroga bajo la presidencia de Banzer se ha
transformado para el futuro mandatario boliviano en el buque insignia de la
relación con Estados Unidos.

Ese proyecto, único en la subregión andina, conjuga la lucha contra el
cultivo de coca y el tráfico de cocaína con el objetivo sostenido del
Congreso y gobierno de Estados Unidos de eliminar paulatinamente la fuente
del narcotráfico y promover un plan de desarrollo sostenido.

El reconocimiento al Plan Dignidad fue hecho, reiteradamente, por la pasada
administración de Bill Clinton y la nueva de George W. Bush, que han
subrayado que la ejecución de ese plan se ha realizado en un clima de paz y
respeto a los derechos humanos, a diferencia de las críticas que suelen
recibir por este mismo tema Colombia y Perú.

En el año de gobierno que le tocará presidir a Quiroga, quien se convertirá
en el mandatario más joven de Latinoamérica, su régimen puede sentar sólidas
bases con el apoyo económico estadounidense para salir de la honda crisis
económica y social que flagela a la nación andina, según fuentes
diplomáticas de Washington.

Hay una coincidente sintonía entre La Paz y Washington sobre los temas de
energía, comercio y drogas.

Quiroga es el impulsor del proyecto de exportación de gas natural boliviano
a Estados Unidos, plan que abre un frente de esperanza para aliviar la
crisis energética de California. Aunque es una iniciativa de largo plazo, en
la administración del nuevo presidente puede dejar sólidos cimientos que
podrían fortalecer la economía boliviana durante el próximo gobierno, a
elegirse en el año 2002.

En el capítulo comercial, Bolivia tiene expectativas de que Washington
extienda el Acuerdo sobre Preferencias Arancelarias Andinas (APTA, por su
sigla en inglés) y promueva el Area de Libre Comercio de las Américas,
proyectos sobre los que Quiroga puso énfasis desde la vicepresidencia.

En privado se expresa satisfacción en Washington por la oportunidad de un
cambio generacional en la administración boliviana, en el marco de
continuidad institucional que inició Banzer.

Quiroga tiene la declarada simpatía del secretario de Estado, Colin Powell,
de la asesora de seguridad nacional de la Casa Blanca, Condoleezza Rice, y
su colega para Latinoamérica, John Maisto, así como del titular de Energía,
Spencer Abraham.

En el frente legislativo, el Plan Dignidad, que ha sido conducido por
Quiroga, cuenta con el respaldo expresado públicamente en las dos cámaras
del Congreso estadounidense, puesto de manifiesto en el tratamiento de la
partida de ayuda exterior para la región andina, en el que se ha defendido
el apoyo a Bolivia por los logros hasta ahora conseguidos.

En el debate legislativo para la asignación de esos fondos, se han hechos
serias observaciones y propuesto condicionamientos a la cooperación a
Colombia, mientras que a Perú le cobran el esclarecimiento del derribo de
una avioneta civil con pasajeros estadounidenses.

La Cámara de Representantes ha votado abrumadoramente la asignación de 676
millones de dólares a la llamada Iniciativa Regional Andina (que reemplaza
al Plan Colombia), garantizándose 148 millones para Bolivia, de los cuales
42 irán en el año 2002 en apoyo a los planes de desarrollo económico y
social, y 101 a la lucha antidrogas.

En el Senado, el Comité de Apropiaciones recortó la partida pedida por la
Casa Blanca de 882 millones de dólares para la región andina y aceptó
autorizar 718 millones. En el debate de la semana pasada igualmente quedó en
claro en la Cámara Alta que Bolivia debe ser preservada por su éxito.

La administración de Quiroga iniciará actividades con el sólido apoyo de
senadores como Mich McConnoll, Mike Devine y Joseph Bidden, que
reiteradamente han expresado su respaldo al Plan Dignidad.

En la Cámara Baja la nueva administración boliviana cuenta por anticipado
con numerosos apoyos, entre los que destacan los de Mike Souder y John Mica.