Medio centenar de heridos en terremoto al norte de Chile



Santiago de Chile, 24 jun (EFE).- Medio centenar de heridos, cinco de ellos
graves, y cuantiosos daños materiales es el resultado del seísmo que en la
tarde del sábado sacudió la zona norte de Chile y que también afectó al sur
de Perú, donde causó al menos 47 muertos, quinientos heridos y un millar de
desaparecidos.

En el territorio chileno, el movimiento sísmico se sintió en las regiones de
Tarapacá y Antofagasta, y afectó especialmente a la ciudad fronteriza de
Arica, situada a 2.000 kilómetros al norte de Santiago.

En ese lugar el temblor tuvo una intensidad de 7 grados en la escala de
Mercalli y provocó el derrumbe de una treintena de viviendas,
desprendimiento de rocas, cortes en el suministro de energía eléctrica y en
el servicio telefónico.

Los ministros chilenos de Obras Públicas, Transportes y Telecomunicaciones,
Carlos Cruz, y Vivienda, Jaime Ravinet, viajaron hoy a la zona afectada,
acompañados de personal de la Oficina Nacional de Emergencias.

El alcalde de Arica, Carlos Valcárcel, pidió al Gobierno que envíe fondos
para reconstruir la zona devastada.

La mayor parte de la población de Arica no durmió la pasada noche, durante
la cual se produjeron numerosas replicas de 3 grados de intensidad y los
servicios médicos atendieron a un centenar de personas que sufrieron crisis
nerviosas Las viviendas del casco antiguo de Arica, hechas de adobe,
sufrieron daños estructurales y hay una treintena de casas derrumbadas.

Las construcciones en esa zona son muy antiguas, algunas centenarias, por lo
que las autoridades municipales estudian proceder a su demolición.

Como consecuencia del temblor se produjeron tres incendios y el suministro
eléctrico permaneció interrumpido en un 40 por ciento de las viviendas,
aunque se espera que en las próximas horas se restablezca totalmente.

El acceso a Arica por el norte está despejado, mientras que en la ruta sur,
el puente sobre el río Camarones ha sufrido graves desperfectos y hay
desprendimientos de rocas en varios puntos.

En el Morro de Arica, un enorme peñón que domina esta ciudad fronteriza,
también se produjeron desprendimientos de rocas, lo que causó el pánico
entre la población.

La capacidad de las comunicaciones telefónicas entre Perú y Chile está
reducida a un 30 por ciento, debido que el movimiento telúrico daño el cable
submarino que une ambos países.

Esta circunstancia angustia a muchos ciudadanos peruanos que residen en
Chile y que intentan tener información sobre la situación en que se
encuentran sus familiares. EFE mf/fpa


Nello

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